Inexplicable lo sucedido el pasado sábado en la pista del Quirinal. 

ADBA empezó el partido dominando en todas las facetas del juego. El tiro exterior estaba acompañado por balones dentro, penetraciones, contraataques y una muy buena defensa. 

Las de Navia, que parecía que iban a tirar la toalla, se quedaban con anotaciones muy bajas mientras que las locales parecía que volaban. 

De un momento a otro, como un chasquido de dedos, todo cambió. Con un par de 2 + 1 del rival, un par destripes y una buena defensa en los dos últimos minutos del segundo cuarto, las de Navia enseñaron a las chicas de ADBA como se juega a esto. Con corazón y en equipo. 

La salida de los vestuarios no nos vino nada bien, a pesar de las intentonas de nuestras jugadoras, Navia lo metía todo. El acierto desde la línea de 3 puntos castigaba a las defensas de ADBA, defensas que eran comandadas por el orgullo y el honor y no por la cabeza y las normas marcadas en los entrenamientos. 

Navia siguió jugando en equipo hasta el final del partido y nosotras, fallando canastas solas debajo de aro y haciendo un 9/31 tiros libres. Un pésimo porcentaje que hace que no puedas competir contra uno, sino el mejor juego en equipo de la categoría. 

Una pena esta derrota para nuestras jugadoras que ahora se enfrentan a 5 finales para lograr meterse en final a 4. Objetivo que estará bastante complicado si no empezamos ya a ir todas juntas a por ello.

Enhorabuena al rival por su juego, por enseñarnos lo que sabe hacer y ojalá consigáis vuestros objetivos.