Un partido entre semana siempre es complicado. Una hora donde las jugadoras no acostumbran a entrenar y que se notó desde el calentamiento.

Salimos al partido muy poco concentradas. Sin hambre en defensa y sin jugar en equipo en ataque. los tiros libres (20 en la primera parte) del equipo rival hacían que el partido fuese demasiado parado para nosotros. Sin ritmo. 

Tras salir de los vestuarios con 10 puntos de ventaja, parecía que nuestras chicas iban a cambiar el chip, aunque seguimos sufriendo hasta el último cuarto. 

El rival hacía valer su altura para destrozarnos en el rebote, teniendo varias opciones de tiro por ataque, castigando casi siempre con tiros libres o canasta. El poderío de Naranco en defensa también nos lastró, ya que nos costaba mucho jugar 1x1 en ataque, muchas veces sin llevarnos el premio de tirar tiros libres, no como en nuestro aro. 

En el último cuarto, ADBA despertó y se notó el bajón físico de nuestro rival y el gran momento de forma que vive el nuestro. 

Ahora si parecía que las chicas entendieron que era mejor jugar en equipo y defender con las ganas de recuperar el balón lo antes posible. 

Un parcial de 25-4 a favor rompió el partido y logramos llevarnos este durísimo partido. 

En la tarde de ayer todas las jugadoras dieron la cara. No era nada fácil competir un partido con 3 de las jugadoras que más minutos tienen mermadas por la gripe o con molestias de rodilla. Este partido nos ha servido para ver que el equipo es más duro mentalmente que otros años y que seguimos creciendo semana a semana. 

Enhorabuena al equipo rival y nos vemos en la vuelta.